Esta época que estamos viviendo, pasará a la historia por la pandemia que sufrimos, pero podemos también hacer historia saliendo todos juntos haciendo una sociedad más justa y solidaria.
Los datos están siendo devastadores pero debemos sobreponernos sabiendo que ya nada volverá a ser como antes.
Es ahí, precisamente, donde podemos hacer hincapié. Esforcémonos por salir con actitudes renovadas, y construyamos una sociedad con justicia y solidaridad, en la que nadie se quede atrás.
Eso se traduce en oportunidades más equitativas para todos. De eso sabemos mucho en nuestro Centro Sopeña Madrid, donde trabajamos bajo el lema La Oportunidad de Superarte.
Para disfrutar de oportunidades que desemboquen en una sociedad más justa hemos de trabajar en comunión, sin importar orígenes u otras diferencias, sintiéndonos colaboradores, extendiendo una mano al otro, solo por el hecho de ser persona.
Desde la Fundación Dolores Sopeña a la que pertenece nuestro Centro Sopeña Madrid, queremos abanderar esta nueva era, aprovechar las consecuencias para convertir los huracanes de dificultades en brisas de esperanza.
Llegado el día, esperemos que cercano, en el que podamos salir a la calle y retomar actividad y cotidianidad, volveremos a abrazarnos, a compartir afectos, cuidados y cariño.
En definitiva, volveremos a vivir, si es posible, fraternalmente, como nos sugieren los valores Sopeña.
Volverán nuestras clases, nuestros viajes, las reuniones con la familia y los amigos, las cosas pequeñas, sencillas y humildes, porque de eso también estamos aprendiendo mucho durante este confinamiento.
Las cosas sencillas, la cotidianidad de nuestras relaciones, son las que nos alegran la vida, lo que realmente vale la pena.
Y no nos olvidemos, para que, en la medida de lo posible, no se vuelva a repetir, de la cantidad de personas que han perdido la vida que, en muchos casos, han tenido que afrontar su último trayecto sin la compañía física de sus seres queridos.
Nuestro recuerdo siempre con ellos, especialmente con los más mayores, que fueron y son un pilar fundamental de la sociedad tal y como la conocemos.
Que a pesar de todo, nadie nos pueda robar el mes de abril.