Durante este mes de enero, en la Fundación Dolores Sopeña, a la que pertenece nuestro Centro, celebramos numerosas actividades en recuerdo a nuestra fundadora, Dolores Sopeña. Ella siempre supo ver la importancia de dar y aprovechar la segunda oportunidad.
Su inquietud se centraba en facilitar a cada persona adulta la posibilidad de mejorar gracias a su esfuerzo, gracias a la formación y capacitación profesional, y disponer así de una segunda oportunidad.
Promocionarse a través de la acción formativa es un trabajo arduo e intenso, tanto para el formador como para el alumno. Para este último que, en el caso de nuestro Centro, es una persona con necesidad de reinventarse profesionalmente, es una segunda oportunidad, tan difícil de encontrar a veces, pero tan apreciada por quien verdaderamente la necesita y está dispuesta a aprovecharla.
Cuando tienes el deseo y la necesidad de salir adelante por tus propios medios y, además de ti dependen otras personas, es necesaria una gran fuerza de voluntad y valentía para buscar esa acción que te ayude a cambiar tu situación.
Y la Fundación Dolores Sopeña, que trabaja en el distrito de Puente de Vallecas y en Madrid, desde finales del siglo XIX, siempre tuvo la misión de estar ahí para quien haya decidido enérgicamente crecer y mejorar de forma integral.
Las mujeres y hombres que acuden cada curso a nuestro centro son personas que han querido recoger el guante y aprovechar su oportunidad de forma positiva.
Algunos amplían o renuevan los conocimientos que ya tenían, pero otros cambian completamente de registro, con las dificultades que ello conlleva.
Tanto si se elige la promoción profesional con la ampliación de conocimientos, como si el estudio se encamina a la compleja tarea de aprender un nuevo oficio, se lleva a cabo por un camino de acompañamiento y crecimiento personal que nuestro centro fomenta.
En cualquiera de los casos, la nueva ocasión que se les presenta es alentada por el ánimo que Dolores Sopeña ofrece con sus palabras, siempre vigentes: “Luchar sin descanso, que con la virtud de la constancia y una buena dosis de paciencia todo lo lograréis”.