La tradición manda y un año más en nuestro Centro de Formación y Capacitación Sopeña Madrid rendimos homenaje a nuestra fundadora. Además, en 2018 estamos celebrando el Centenario de su muerte y nos hacía especial ilusión poder mostrar a nuestros alumnos quién fue y qué hizo Dolores Sopeña con una divertida Gymkhana.
Así que, durante la tarde del 25 de abril, nos reunimos los trabajadores, colaboradores y alumnos del Centro para pasar una tarde por todo lo alto.
¿Sabéis cómo funciona una Gymkhana, no? Se trata de superar una serie de tareas y obstáculos compitiendo entre equipos.
En nuestro caso, las pruebas, repartidas por todo el Centro, nos ayudan a profundizar un poco más en la figura y la labor de Dolores Sopeña, en su trayectoria, su motivación y su carisma.
Los alumnos, organizados por clases, recorrieron las distintas aulas realizando las pruebas y superando los obstáculos propuestos por los profesores y colaboradores del Centro, situados también estratégicamente en el recorrido para dirigir y apoyar la actividad.
Buscar y situar en un globo terráqueo los países en los que está presente la Obra de Dolores Sopeña, responder a las preguntas de un Trivial temático sobre nuestra fundadora, formar palabras con el cuerpo, hacer alfagramas, someterse a test de memoria y, hasta un Pasapalabra propio. Pruebas todas ellas afrontadas con competitividad y compañerismo que hicieron que lo pasáramos en grande.
Nada más bonito que sentir nuestro Centro lleno de vida, de alegría, sentir la casa llena de nuestra familia, porque tanto alumnos como profesores y colaboradores, formamos la gran Familia Sopeña.
En todo juego siempre hay un ganador. Este año fue Peluquería que, haciendo gala de todo lo que sabían sobre la Fundadora, sobrepasaron a los demás grupos. Por detrás quedaron Electricidad, Estética, Cocina, Informática, Español, o Atención Sociosanitaria. Pero ¿a quién le molesta perder después de haberse reído tanto?
Y el momento más dulce de la Gymkhana llegó al final, como no, con las tartas elaboradas por los compañeros del Certificado de Profesionalidad de Repostería, y un delicioso chocolate caliente que prepararon los alumnos de Ayudante de Cocina. Y es que ¡la derrota con dulce es menos derrota!
Desde el Equipo de Pastoral, que es quien organiza este día, queremos dar las gracias a todos los que con su apoyo y energía hicieron posible que lo pasásemos tan bien. Especialmente a nuestros alumnos y a nuestros colaboradores porque, son ellos los que, con sus ganas y su talento, hacen que las huellas de Dolores Sopeña estén más vivas que nunca.
El próximo año repetimos, ¿te apuntas?