Decía nuestra fundadora, Dolores Sopeña: “¡Me gustan los espíritus alegres!” y qué puede haber más alegre que la música, pues el Día de la Música.
Desde el Centro Sopeña Madrid vamos a acompañar con actividades y celebraciones la conmemoración de Santa Cecilia y el Día Internacional de la Música y los/as Músicos/as.
Deseamos que todos y todas tengáis siempre música en el alma, pero ¿queréis saber más cosas sobre Santa Cecilia y por qué es su patrona?
Cecilia de Roma fue una joven mártir que vivió alrededor del 180 d. C. y murió un 22 de noviembre. Por eso se conmemora esta fecha como el Día de la Música, porque en la vida de Cecilia, la música y el cantar siempre estuvieron presentes, incluso en los peores momentos.
Fue en 1594 cuando el entonces papa Gregorio XIII la nombró Patrona de la Música y de los/as Músicos/as. Reconoció así su fuerte vínculo con los acordes, los sonidos y los instrumentos musicales de su época. Incluso en numerosas obras de arte siempre ha sido representada tocando un instrumento musical o cantando.
Junto con la historia de Santa Cecilia, la música está presente en toda la historia y desarrollo de la humanidad. Porque la música forma parte de nuestras vidas, en lo cotidiano y en momentos especiales, como un poderoso lenguaje universal.
La música nos conecta con otras personas y con nuestras propias emociones, con recuerdos, con ilusiones, y tantas otras cosas más.
La música logra unión con toda su diversidad de géneros y estilos. Y, cómo no, con las letras. ¿Sois conscientes del bello vínculo entre música y letras?
Concretamente, si pensamos en la música en español, una de las lenguas más habladas del mundo, podemos ver que reúne a una comunidad de casi 500 millones de hispanohablantes, por ejemplo, en torno a los Premios Grammy Latinos, uno de los eventos más importantes para la industria de la música en español que tuvo lugar hace días en Sevilla.
Las formas de crear y escuchar música han cambiado a lo largo de la historia, y podemos notarlo con fuerza en la actualidad. De todos modos, más que una industria, la música es, ante todo, una de las formas esenciales de expresión artística y cultural.
La música siempre está, con toda su diversidad, para proponer encuentro, unión esperanza, expresión, fuerza, creatividad… En palabras del filósofo Nietzsche, “sin música, la vida sería un error”, porque la música, como todas las artes, nutre el alma.
Hablando de música, ¿sabéis que la Familia Sopeña, de la que formamos parte, tiene también su propio himno musical?
